El cartero siempre da doble check


Hace unos días, Whatsapp tomó una decisión que cambiaría totalmente la forma de ver su aplicación: el tan polémico «doble check azul», que permite ver si el contacto ha leído el mensaje que le has mandado, ¡y a qué hora ha sido! Como era de esperar, internet ardió con críticas hacia esta medida, que además se impuso a través de la nueva actualización (a algunos, como yo, ni siquiera nos hizo falta actualizar para eso). Pero, ¿merece esto tanto revuelo? ¿O quizá se está dramatizando demasiado?

Whatsapp: rompiendo amistades y relaciones desde noviembre de 2014

La crítica más frecuente que se lee es el hecho de que «estamos más controlados». No lo veo yo tan claro. Amigos controladores y obsesivos habrá siempre, y ya antes podíamos sufrir las consecuencias, como el recibir treinta mensajes tipo «¿hola?», «¿estás ahí?», «eooo», y demás. A ese tipo de personas les da igual que estés en el médico, en una reunión, o en un entierro. Para ellos, si no les contestas inmediatamente, les estás ignorando. No hay término medio.

Posible interpretación de cuando han leído tu mensaje 
(si no es importante) y no contestan.

Esta situación me recuerda a cuando tuvo lugar el «boom» de las Blackberry (aquellos días en los que todo el mundo tenía la 8520). Los que hayan poseído una recordarán el famoso Blackberry Messenger, en el que, ¡qué novedad!, se podía saber cuándo tus contactos habían leído los mensajes. Y que yo recuerde, nadie montó un escándalo por ello, siendo exactamente lo mismo.

 
Hitler no aprueba el  «doble check azul» del Whatsapp

Para los enemigos de este «doble check azul», un consejito: si queréis leer mensaje sin que los demás sepan que lo habéis hecho, entrad en el Whatsapp con el modo avión activado. Mientras no esté el internet conectado, el mensaje no contará como leído.

 
 «Ronaldo, ¿tú qué opinas del doble check azul?»

Por otra parte, también tengo un consejo para los amigos excesivamente controladores: sed más comprensivos y mirad más allá de vuestro ombligo. No todos podemos estar pegados al Whatsapp 24/7, o no podemos contestar al instante aunque leamos el mensaje. A mí me ha pasado eso varias veces: estar en clase, leer el mensaje, pero enseguida tener que volver a atender para copiar. Puede haber mil motivos más importantes, y frustrarse porque no ha leído un mensaje (y más si no es algo importante) es de ser bastante inútil, y más teniendo en cuenta que la posibilidad de LLAMAR POR TELÉFONO (lo sé, acabo de descubriros América, por lo que parece).

Concluyendo, que cabrearse porque ahora se puede saber si han leído los mensajes (aunque ya ocurriera antes con el BB Messenger) es una chorrada monumental. Si tienes amigos controladores y con poca madurez mental, no es problema de la empresa de Whatsapp.

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